La naturaleza como inspiración
Mi mejor amiga, Mariposa, llegó muy contenta de su último viaje, porque en su maleta traía un cuaderno lleno de poemas recién escritos por ella. Así es. Mi amiga es una gran viajera y también una gran poeta.
-¿Sobre qué son los poemas que escribiste?-, le pregunté a mi amiga.
-Son poemas sobre flores, Memoriosa. Visité bosques y volé sobre montañas, donde encontré flores tan lindas que me inspiraron a escribir. Le escribí un poema a la Flor del Bigote (Bipinnula fimbriata), que parece que tuviera un bigote, igual que un elegante señor; a la Flor del Gallo (Alstroemeria ligtu), que tiene hojas de un hermoso color naranjo; y a mi favorita: la Estrella Azúl de Cordillera (Malesherbia linearifolia), una flor muy fuerte, capaz de crecer a pleno sol y con muy poca agua.
Mi amiga no sólo le ha escrito poemas a flores. Toda la naturaleza la inspira y ha escrito también poemas al mar y a distintos animales, como el guanaco y la chinchilla.
-Cada vez que estoy rodeada de naturaleza, veo cosas tan hermosas y me siento tan feliz, que me dan ganas de escribir poemas para compartir lo que siento con el mundo-, me contó mi amiga.
Hay muchas personas que al igual que Mariposa, se han sentido inspiradas por la naturaleza.
¡Les invito a conocerlas en un recorrido por la Biblioteca Nacional!
Escucharemos canciones inspiradas en flores, veremos pinturas de hermosos paisajes y leeremos a escritores y poetas, que han visto y descrito la naturaleza de una forma muy especial.
También conoceremos a un antiguo animal fantástico, que sólo ayuda a las personas de buen corazón, y leeremos el cuento del zorro y el tábano, un antiguo cuento mapuche, que se ha contado desde hace cientos de años y que habla de la importancia de la honestidad. Como verán conmigo, la naturaleza no sólo nos puede inspirar a crear, sino que también nos puede inspirar a ser mejores personas.
Memoriosa.
*Imagen: Santiago. Cerro Santa Lucía, El Mirador [fotografía] C. Kirsinger & Cia. / Disponible en Biblioteca Nacional Digital.