Pablo Neruda fue un poeta que tuvo intereses muy distintos. Escribió poemas de amor y también poemas políticos y al cumplir 50 años, quiso escribir poemas para celebrar las cosas que amaba.
Por ejemplo, las cosas que amaba eran: las flores de la costa, Valparaíso, la primavera y la alcachofa. A todas estas cosas les dedicó odas (es decir, poemas de admiración) que publicó en sus libros Odas elementales (1954), Nuevas odas elementales (1956) y Tercer libro de odas (1957).
El Archivo del Escritor de la Biblioteca Nacional, conserva la voz de Pablo Neruda recitando la Oda a la manzana. ¿Les gustaría escucharla? Al comienzo podrán notar que el poeta explica el cariño que siente por las cosas: "Muchos versos dediqué a las cosas más sencillas. Por ahí andan mis versos entre tomates, ciruelas, papas y manzanas. Mi poesía a veces me parece un mercado. Y no me da vergüenza".
Memoriosa.




