En 2005 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró Cabo de Hornos como Reserva Mundial de la Biósfera.
El territorio reconocido tiene una extensión de 4.884.274 hectáreas y está compuesto de áreas marinas (2.967.036 hectáreas) y terrestres (1.917.238 hectáreas), que están bajo la máxima protección ambiental de acuerdo a la ley chilena.
"El cabo de Hornos alberga un tesoro de diversidad biológica y cultural", nos contó la Mariposa y sacó de su mochila de viaje un álbum de ilustraciones de la flora y fauna del lugar.
Me pidió que por favor las compartiera con todos ustedes.
¡Vamos a verlas!
Memoriosa.