Gabriela Mistral decía que al descubrir la poesía, había comenzado "la fiesta de su vida", pese a que muchos de sus poemas son muy tristes. El primer reconocimiento por su trabajo como poeta lo obtuvo en los Juegos Florales de 1914 con "Los Sonetos de la Muerte". ¿Se habrá imaginado en ese momento que 31 años después recibiría el Premio Nobel?
Un tema que interesó mucho a Mistral fue la naturaleza y escribió mucho sobre flores y animales de Chile.
Niñas y niños tenemos mucha suerte porque doña Gabriela también escribió poemas sobre nosotros. Y, a propósito, ¿les gustaría escuchar una parte de un poema leído en su propia voz? Se llama La manca y empieza con estos versos: "Que mi dedito lo cogió una almeja / y que la almeja se cayó en la arena / y que la arena se la tragó el mar".
Memoriosa.